- ¿Te acaban de pasar una imagen viral por Facebook o WhatsApp y no sabes si es auténtica o es puro montaje? Cada vez es más difícil detectar montajes gracias a lo mucho que han avanzado editores de fotos como Adobe Photoshop.
- Más allá del sentido común, debes estar atento a detalles en las fotos como distorsiones, manos sin dueño (ocurre más a menudo de lo que crees), sombras que nada tienen que ver con su cuerpo original...
Adobe Photoshop y otros editores de fotos similares han traído cosas muy buenas, pero también han popularizado la manipulación de imágenes. Cada vez es más difícil saber si una imagen viral que te han compartido por Facebook o WhatsApp es real o es un montaje. Toma nota de estas señales para detectar si alguien ha abusado demasiado de Photoshop.
Distorsiones
Es la señal más evidente y popular que indica que una imagen ha sido manipulada. Si dudas sobre una foto que te acaban de pasar, observa el fondo. ¿Hay alguna línea horizontal que de repente se bombea? Esa distorsión es señal de que alguien se ha quitado kilos de más (o añadido músculos de más) y como resultado ha alterado los elementos de alrededor.
Sombras extrañas
Las sombras reales son alargadas, se proyectan hacia la superficie más cercana. Un error muy común en las imágenes photoshoppeadas es convertir la sombra en una especie de segunda capa del cuerpo original. Desconfía si ves algo así. O si no hay sombra en absoluto.
Otra pista de que algo anda más es cuando la sombra proyecta no se corresponde con su cuerpo. Fíjate si alguien se ha añadido elementos (de ropa, físicos…) pero estos no se notan en la sombra. O al revés: sombras de elementos inexistentes.
Pixelación
Cuando alguien amateur edita una imagen, no se suele dar cuenta de la pixelación que se ha producido. Este fenómeno reduce la calidad de la foto cuanto más zoom hagas. Normalmente verás zonas borrosas o levemente distorsionadas. Así que amplía la imagen a examen y busca áreas pixeladas.
Objetos o patrones repetidos
Cuando se retoca mucho una imagen, una forma de ocultar la distorsión consiste en copiar-pegar otra sección que no ha sido photoshoppeada. El problema es que entonces se crean clones muy evidentes si analizas con mirada crítica. Por ejemplo, si notas que el cielo del fondo tiene nubes muy parecidas, o que el bosque parece estar compuesto por los mismos 2-3 árboles, es que la foto ha sido manipulada.
Bordes extraños
Hay dos señales a tener en cuenta con los bordes de personas u objetos que pueden haber sido "pegados" a la imagen. Ambas son extremos: la primera señal es cuando el borde de alguien o de algo ha sido evidentemente recortado (tiene aristas, no es consistente…); y la segunda señal es cuando el borde es demasiado suave y perfecto.
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Ausencia de reflejos
Cuando algo no se refleja en una superficie pulida, o se trata de un vampiro o de una manipulación vía Photoshop. Un buen ejemplo son objetos colocados en una mesa de cristal: si no se reflejan en ella es que algo va mal.
Texto al revés
Si en la foto se lee olonaM raB en lugar de Bar Manolo, es que ha ocurrido una de las manipulaciones más evidentes: coger una sección de una foto y rotarla horizontalmente.
Objetos fantasma o desaparecidos
Si hay un objeto o elemento de la imagen cuya existencia en ella no tiene mucho sentido (por ejemplo, una mano flotante) o si falta un objeto evidente (muchos amateurs no se dan cuenta de que han cortado brazos enteros, por ejemplo), es que ha habido manipulación.
Inconsistencias en la luz
Por norma general, en una imagen debería haber una única fuente de luz, natural o artificial. Si todas las personas y elementos de la misma reciben dicha luz de forma consiste y coherente, entonces todo bien. Pero si hay zonas oscuras donde no debería haber, o parece que haya más de una fuente lumínica cuando eso es imposible, es que esa foto ha sido retocada.
El tamaño de la imagen
Una imagen manipulada con Photoshop o con cualquier otro tipo de software tiene mayor tamaño de lo normal debido a las capas que se han añadido con los efectos y retoques. Si ves que una foto muy simple pesa 10-20 MB, por poner un ejemplo, posiblemente esconde al menos un montaje.
Metadatos que no encajan
Si eres más que un aficionado a la fotografía, detectarás engaños y manipulación observando los metadatos de las fotos. Por ejemplo, si la información explica que la foto se tomó con apertura baja y profundidad de fondo, es normal que dicho fondo salga borrosa mientras que todo lo contrario apunta a manipulación.
Puedes utilizar páginas web como metapicz para sacar los metadatos.
Para acabar de confirmar: herramientas de análisis fotográficas
Si intuyes que algo va mal en la imagen, pero no logras identificar el qué, puede que la persona que la ha manipulado con Photoshop tenga un nivel elevado. Por suerte, existen en Internet muchas herramientas gratuitas que te dicen si ha habido retoque (y cómo podría ser la foto original).
Is Your Image Edited es un servicio web que te analiza la imagen dudosa. Su análisis sencillo es gratuito y luego si quieres un informe más exhaustivo de la manipulación sí que tendrás que pagar.
Si quieres una segunda opinión, FotoForensics es otro servicio web similar y gratuito. Además, en este caso puedes hasta analizar una imagen que no tienes almacenada en tu disco duro, pero que ha sido colgada en la red; pegas su URL y punto.
Truco añadido: utiliza Google para descubrir los orígenes de una imagen
En ocasiones, la foto en cuestión no ha sido manipulada, pero sí que puede haber sido robada de otro lugar. Para descubrir puedes utilizar la búsqueda de Google Imágenes, un motor en general muy infrautilizado.
Cuando abras Google, selecciona la sección Imágenes arriba a la derecha. Haz clic en el ícono de la cámara de fotos (a la derecha de la barra de búsqueda) y luego elige la foto dudosa. Google te buscará esa misma imagen o similares. Si existen duplicados, es muy posible que te hayan engañado.
Fuente: https://www.businessinsider.es/
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