El ozono es un gas incoloro que nos protege filtrando la radiación ultravioleta del Sol y que es util en la cantidad y lugar correctos. Sin embargo, cuando hay altas concentraciones de este, es tóxico para el corazón y los pulmones. También puede provocar irritación de garganta, dificultad para respirar, asma o daño respiratorio.
Un gran avance
«Esto fue muy desafiante. Nadie había hecho esto anteriormente. Creo que somos los primeros en intentar pronosticar los niveles de ozono en la superficie con dos semanas de anticipación», dijo Yunsoo Choi, profesor de química atmosférica y aprendizaje profundo de Inteligencia Artificial. A partir de los tres días, la precisión en el sistema comienza a disminuir.
Los miembros del equipo agregaron datos históricos de ozono a las pruebas a medida que ajustaban de forma gradual las reacciones del programa. Esto hace que el algoritmo de la Inteligencia Artificial pueda hacer una predicción con precisión de los resultados de las condiciones del ozono en la vida real al reconocer lo que sucedió antes en situaciones similares.
A una Inteligencia Artificial se la da información y tras muchas correcciones y repeticiones, el proceso de refina con el tiempo y el programa llega a saber cómo reaccionar ante condiciones que ya conoce de antes.
Años de estudio y trabajo
El equipo usó datos de cuatro a cinco años de ozono. Lo describieron como un proceso de evolución de enseñar al sistema de Inteligencia Artificial a reconocer las condiciones del ozono y hacer predicciones del ozono y hacer pronósticos, mejorando con el tiempo.
Durante las pruebas en el laboratorio el equipo lo pasó mal durante algunos años, aunque finalmente han conseguido dar con la clave, aplicando el aprendizaje profundo a la calidad del aire y el pronóstico del tiempo. Finalmente, ya se ha conseguido ajustar el sistema lo suficiente después de varios años, ya que la Inteligencia Artificial ya entiende como pronosticar.
Antes de que el éxito en el laboratorio pueda conducir a un servicio en el mundo real, se adelantan muchos pasos comerciales antes de que el mundo pueda beneficiarse del descubrimiento.
De hecho, se cree que esta tecnología podría ayudar en el futuro no solo con el ozono, sino que también podría ayudar a combatir el cambio climático y hacer de nuestro planeta un lugar más seguro ya que conocer la calidad del aire puede hacer que se entiendan muchas cosas relacionadas con el clima.
Leovankis Cornielle S.
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