Ha sido desarrollada por un grupo de ingenieros de la Universidad de California en San Diego, Estados Unidos. Los sistemas 5G de hoy en día transfieren datos a través de un rayo de onda milimétrica muy parecido a un láser desde y hacia una estación base y un receptor (en este caso, el receptor es nuestro teléfono móvil). Sin embargo, si algo se interpone entre dicho rayo, la conexión se bloquea de forma automática.
Dividir el rayo en varios, la clave
Confiar en un solo rayo provoca que solo pueda existir un punto de fallo. Por tanto, los ingenieros propusieron una solución que consistía en dividir el rayo de ondas milimétricas en varios, y cada uno tendría una trayectoria diferente desde la estación base hasta el receptor.
Así, al menos uno de los rayos podría llegar al receptor en caso de que los otros encontraran algún tipo de obstáculo durante el trayecto.
Para construir este sistema, se creó un conjunto de algoritmos nuevos. El primero de ellos le dice a la estación base que divida el rayo en varios. Algunas de las trayectorias se hacen de forma directa hacia el dispositivo receptor, mientras que otras no debido al rebote con diferentes objetos.
Una vez hecho esto, el algoritmo toma la decisión de elegir la mejor ruta mediante prueba y error, optimizando el ángulo, la fase y la potencia de la señal para crear de forma colectiva una señal más potente, de mejore rendimiento y de mayor calidad.
La calidad y la potencia no se ven afectadas
Aunque se podría pensar que dividir el rayo de onda milimétrica significaría una reducción del rendimiento o de la calidad de la señal, el algoritmo está hecho para que esto no suceda. Además, otro algoritmo mantiene la conexión en caso de que el usuario se mueva o de un paso en la ruta de la señal. Estos movimientos inesperados pueden provocar una desnivelación que el algoritmo soluciona haciendo un seguimiento del movimiento del usuario y realineando los parámetros.
Lo mejor de todo es que este sistema se puede desarrollar con tecnología de comunicaciones que ya existe. Todos los algoritmos cumplen con los protocolos 5G actuales. Lo único que se necesita es una pequeña estación base equipada con una matriz en fase desarrollada en el laboratorio de la Universidad de San Diego.
Así pues, esto se trata de una nueva tecnología importante para el desarrollo de la red 5G. aun así, puede pasar un tiempo hasta que los diferentes operadores sean capaces de adaptar sus redes de banda alta para ejecutar soluciones como esta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario