El expresidente de Estados Unidos Ronald Reagan pidió a la NASA que construyera la Estación Espacial en 1984. En 1998, Rusia, a través de su agencia, Roscosmos, lanzó el primer módulo de lo que acabaría siendo la Estación Espacial Internacional y, desde entonces, ha albergado a más de 250 «habitantes». Con semejante trayectoria, es normal que el paso de los años haya dado lugar a miles de curiosidades y secretos.
Hoy te vamos a transportar a la Estación Espacial Internacional para que conozcas mejor esta infraestructura clave, fruto de un proyecto de colaboración multinacional entre las cinco agencias espaciales participantes: NASA, Roscosmos, JAXA, ESA, y la CSA/ASC.
Una colaboración internacional
Desde noviembre del 2000, la Estación Espacial Internacional ha sido el hogar de astronautas de todo el mundo que estudian lo que les sucede a las personas que viven y trabajan en el espacio.
El diseño, la construcción y la selección de la tripulación de la ISS fue fruto del trabajo en común de varios países. La nave espacial alberga laboratorios científicos de Estados Unidos, Japón, Rusia y varios países europeos.
Tour virtual
Con el avance de las tecnologías desde que fuera lanzada, hay materiales para conocer cómo es por dentro la ISS. Un ejemplo de ello es el vídeo que grabó el astronauta Reid Wiseman. En este vídeo podemos ver un paseo por los entresijos de la Estación Espacial Internacional, ya que Wiseman recorre los
Desde el módulo de carga, con una cámara GoPro añadida a un soporte metálico, el astronauta recorre de punta a punta la plataforma atravesando en su camino el comedor, el laboratorio, estaciones de soporte eléctrico, y otras dependencias.
También Google ha colaborado con astronautas de la ISS para recoger imágenes de Street View de la auténtica estación espacial. Puedes visitar la Estación Espacial en Google Earth diferentes dependencias como el laboratorio de investigación Columbus, la Cúpula (módulo de observación), el módulo permanente multiuso (PMM, por sus siglas en inglés), el módulo laboratorio Destiny de Estados Unidos, los Nodos 1, 2 y 3 y mucho más.
Problemas con el WC
Una de las mayores curiosidades a nivel de convivencia y vida dentro de los módulos de la EEI tiene que ver con los retretes. Y no solamente por el hecho de que la orina se recicle, filtre y se reconvierta en agua potable.
Durante los primeros años, todos los astronautas, independientemente de su nacionalidad, compartían todo, incluido los retretes. Pero alrededor de 2003, esto cambió cuando los rusos comenzaron a cobrar al resto por usar sus equipos y sus instalaciones. A partir de 2005, también cobra a la NASA por transportar a astronautas a la estación y los norteamericanos negaron a los rusos usar sus instalaciones y equipo y, sobre todo, sus retretes.
16 amaneceres al día
La Estación Espacial mide unos 60 metros de largo y orbita sobre la Tierra a unos 30.000 km/h. A esta velocidad, completa una órbita alrededor de la Tierra cada noventa minutos, lo cual permite que los astronautas puedan contemplar un amanecer cada hora y media. Por tanto, a lo largo de un día, ven dieciséis amaneceres y dieciséis atardeceres al día.
Por tanto, un astronauta ve 16 amaneceres y otras tantas puestas de sol al día. Para tratar de ajustarse a un único huso horario, la hora oficial de la EEI es la de Londres, aunque en Año Nuevo cada uno suele celebrarlo según la hora de su país de procedencia.
¿Flota o cae?
La Estación Espacial Internacional se encuentra en un lugar en el que hay gravedad casi al noventa por ciento, como en la Tierra. Por tanto, en realidad, se está cayendo. Sin embargo, la velocidad con la que gravita alrededor de nuestro planeta contrarresta e impide que no caiga y, por tanto, en verdad está flotando.
Esta especie de caída libre perpetua tiene que ver con el hecho de que la EEI orbita aproximadamente a 400 km sobre la superficie terrestre, por lo que todavía está en el campo gravitatorio que genera. A su vez, orbita en torno a la Tierra a una velocidad de 7,66 km/s, y sus contenidos, tanto humanos como materiales, están expuestos no solo al campo gravitatorio de la Tierra, sino también al de otros objetos masivos, como la Luna, el Sol y los demás planetas que nos rodean, aunque su influencia es mucho menor que la ejercida por nuestro planeta.
Si la EEI no se estuviese moviendo, o no lo hiciese a la velocidad necesaria, no tendría otra opción que caer hacia el centro de masas de la Tierra, pero la velocidad a la que se desplaza es suficiente para mantenerla en caída libre.
Cómo puedes ver la Estación Espacial Internacional
La ISS se ve desde la Tierra, ya que su órbita está a tan solo 354 kilómetros de la superficie terrestre. Visita el sitio web de la NASA Spot the Station para saber cuándo y dónde se podrá ver la estación espacial. La Agencia Espacial Europea (ESA), también tiene una página web en la que podemos ver las trayectorias previstas, así como un punto de referencia sobre Google Maps.
La estación espacial parece un avión o una estrella muy brillante que se mueve por el cielo, excepto que no tiene luces intermitentes ni cambia de dirección. Teniendo en cuenta que es el tercer elemento más brillante que se puede ver en nuestro cielo, después de la Luna y Venus, es probable que la hayas confundido alguna vez con una estrella fugaz. Todos los avistamientos ocurrirán unas pocas horas antes o después del amanecer o el atardecer. Este es el período de visualización óptimo ya que en realidad lo que vemos es el reflejo del sol en los paneles solares de la estación y contrasta con el cielo más oscuro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario