La posición del router es algo indispensable. Trata de ponerlo en una ubicación elevada, alejarlo de otros aparatos eléctricos con los que pueda tener interferencias y de muros que puedan afectar a la propagación de la señal. Cosas sencillas como el suelo, las puertas o las paredes de tu hogar pueden obstaculizar la señal del router WiFi, especialmente si son de metal, ladrillo u hormigón.
En esta ocasión vamos a repasar algunos de los elementos que pueden estar bloqueando o interfiriendo con la señal WiFi de tu casa, para que además de feng shui consideres el mejor lugar de tu router dentro de la decoración de tu hogar.
Televisiones
Teniendo en cuenta que muchos optan por colocar su televisión sobre un mueble para no tener que realizar el proceso de colgarla de la pared mediante un soporte, no es de extrañar que se trate de usar el espacio sobrante en estos muebles y, por ejemplo, colocar ahí el router. Error.
Colocar tu router WiFi cerca o detrás del televisor puede ser una gran idea a nivel de diseño de hogar, pero las televisiones y sus componentes metálicos internos pueden actuar como una especie de escudo electromagnético que interferirá en la señal que sale del router.
Estanterías
Los libros son bastante densos y, si juntas suficientes de ellos, como revestir una pared entera con estanterías, será básicamente como haber construido un gran amortiguador de señal. Atravesar la longitud de una librería larga es aún más difícil para las señales Wi-Fi.
Es mejor no colocar un router o sistema de malla WiFi Mesh en una estantería, pero esto es especialmente cierto si el lugar donde necesitas una señal fuerte está en el extremo opuesto de una gran cantidad de estanterías.
Espejos y ventanas
En el caso de los espejos, muchos expertos aseguran que estos materiales hacen que la señal rebote a otras áreas. Además, pueden tener en su parte trasera elementos de metal que tampoco hacen un favor a la señal inalámbrica, como hemos comentado anteriormente.
Los espejos de pared grandes tienen un impacto mayor que los espejos más pequeños y los espejos más antiguos afectan a Wi-Fi más que los más nuevos debido a que los espejos más antiguos incluso contienen plata real.
El mismo principio que para las ventanas y espejos aplica a las peceras, con el agravante de que no solamente podría reflejar o hacer rebotar la señal, sino que el agua es excelente para bloquear las señales Wi-Fi. Poner tu router Wi-Fi justo al lado de una gran pecera es como ponerle un amortiguador. Obtendrás una buena señal en el lado del tanque donde se encuentra el enrutador, pero notarás una señal degradada en el otro lado.
Electrodomésticos
Algunos componentes de los microondas y otros electrodomésticos pueden retener las ondas y afectar la conexión de Internet a los dispositivos. Aunque la cocina no es aparentemente uno de los mejores lugares donde colocar tu router, la cercanía con ciertos aparatos podría afectar.
Por ejemplo, el frigorífico, la lavadora y la secadora son objetos de metal igualmente gruesos que no son amigos del Wi-Fi. Eso mismo pasa con tu horno e incluso con el calentador de agua también afectan la potencia de la señal de Wi-Fi. Este último lo hace doblemente, ya que no es solo un cilindro de metal gigante, sino que también está lleno de agua.
Aleja el router de cualquier aparato que pueda crear interferencias. Esto incluye los electrodomésticos, pero también cualquier dispositivo que funcione a través del Wi-Fi. Todo esto puede afectar a la calidad de la señal y provocar cortes continuos.
Materiales de construcción
Otro motivo por el que la red Wi-Fi no llega bien es por los obstáculos que pueda haber. Por ejemplo, una pared, un muro, un mueble… Todo esto va a influir y puede bloquear la señal. Hay cosas que afectan mucho más, como por ejemplo una plancha de hierro. Es en estos casos cuando debemos tener más cuidado.
Barreras como muros de yeso, cemento, piedra, ladrillo, también son un obstáculo para que el WiFi pueda operar de manera óptima en los espacios reducidos. Por ejemplo, los postes y vigas de acero interfieren con la señal. Cuanto más metal haya en las paredes de tu hogar, ya sean postes de acero o aislamientos revestidos, más problemas de transmisión tendrás.
Sin embargo, el principal enemigo son los muros de hormigón, muy buenos a nivel de aislamiento y, precisamente por eso, terribles para la transmisión de la señal Wi-Fi. Las paredes de bloques de hormigón no son mucho mejores, aunque no amortiguan la señal con tanta fuerza como el hormigón sólido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario